Lejos de ser espléndidas
Las sardinas muertas
Al borde de tu mar
La nada anida en tus aguas
Secas como los médanos
Ha muerto todo lo que añoro.
Lancé lejos de caronte
Las monedas de mis ojos
Diciembre
baúl de preguntas
Sobres llenos
de arrepentimiento
Frutas podridas
puertas adentro.
Lléname de piedras
Y espinas puntiagudas
Los vientos de mi abanico.
La mano negra
La peste
corazón helado
Guarda los dedos en el bolsillos
Nadie tomará tu mano.
No hay comentarios:
Publicar un comentario