viernes, 25 de agosto de 2017

Perros y gatos.

Ale asusta lo más feroces dragones con su risa
y vuela papagayos con sus pestañas al viento.

Ale sueña despierto y poco dice, porque piensa demasiado.
Ale pinta y esculpe mi piel con su mirada de sol/edad

Ale crea sobre mi rostro historias imposibles mientras duermo
Ale tiene manos pequeñas y sueños tan gigantes que no logran salir de su boca

Ale es roca, papagayos, paz y aliento de lobo feroz sobre mi casa sin paredes.


lunes, 14 de agosto de 2017

Que triste, se oye la lluvia en los techos de cartón

Ahí cae la lluvia Viene lluvia  
Viene pasa¿Cuando pasa el sufrimiento  
¿Cuando viene la esperanza?
-Ali primera

Hay cosas que duelen un cuarto de universo
como un verso/incompleto
las despedidas
los besos
las cercas
inservibles de los ranchos
un perro con la piel pegada al hueso
sobra hablar del hambre

Hay cosas que matan incluso
la inmensa belleza de un cuarto de universo
el otoño/ perderse las perseidas por estar llorando
alguien en vida cubierto por las moscas
la podredumbre
la soledad y esperanza de un prisionero
que sueña con ver el sol por la mañana.

Hay cosas tan dolorosas
que parecen más grandes que el universo mismo
los que caminan sin rumbo como gotas de lluvia venteada
los sin techo
(de dos o cuatro patas)
los que no tienen abrigo para el frío
ni zapatos que se empapen o se rompan porque caminan descalzos
los que nunca se salvan del agua porque no conocen de paraguas...

Hay cosas que tan dolorosas / que matan

incluso...
 tan hipnotizantes para el que las mira
que llega a creer que el venidero tiempo
es la mejor esperanza.

Caracoles

De poder ver
a poder ser 
en cada esquina,
en los ojos de los subtes 
en las guaguas
en las ramas 
en las camas que hacen de bancos y son barco
para los lagrimales de los mendigos 
donde a veces espero sentada 
que mi sentida palabra no se retracte ni se haga ofendida
por los gestos que gestan en la sangre mala.

Los escudos de mi ira batallan con mi tristeza oscura
jamás transparente.
Y el peinado trenzado una y otra vez deja de oler a coco 
para oler a pastel 
a dulce como lo podrido 
como la muerte y las pesadillas que tengo sobre las almohadas
de mi amado
que se anidan durante el día debajo de mis cueros cabelludos.

Y las llamadas nunca hechas pegan brincos 
vibrando como las cuerdas de un trapecista o las de un soprano
da lo mismo
el pensamiento que se pierde en los rieles 
y la palabra que anida en el silencio o en el trago amargo de lo no querido

El trigo, el maíz, los muslos
calientes
el amor
el café los libros
los te's
Nos salvan del hambre 
de la sed
mas sed solo ilusiones cantadas por las sirenas de oscuros mares
de obscuros males 
que no compran sonrisas de marineros 
ni se apiadan de náufragos

Arduo
agría el agua
arde la sal en las hendiduras de Marte
en las cerraduras de las heridas que abren los recitales de poesía 
de mi amor y algarabía
luego de ver los caracoles que aplastas en la entrada 
sin siquiera percatarte. 



Tembló